
A lo largo del tiempo y todas las sesiones de Reiki que he hecho, casi la mayoría de la gente, me han dicho que se han relajado mucho durante la sesión. Esto me ha llevado a pensar el por qué. Y ese es mi punto de vista:
Mucha gente que viene a la consulta por una sesión de Reiki, viene porque hay algo que la desborda, ya sea estrés, algún bloqueo o el simple hecho de no saber avanzar. Incluso, hay gente que viene acalorada, estresada o enfadada porque llegan tarde a la consulta debido al tráfico o de algún otro motivo. El cambio en estas personas al entrar en la consulta y en salir es espectacular.
Explicado de una manera sencilla; Reiki es energía universal que mediante el terapeuta como canal lo utiliza para pasar y “refrescar” la energía vital de la persona que recibe la sesión. Este “intercambio” hace que la energía vital (la energía de la persona) se mueva, se recoloquie y fluya, deshaciendo bloqueos y calmando todo el sistema energético. Es un paso energético muy sutil y suave. Evidentemente cada persona es un mundo y lo interpreta a su manera, pero en general, este flujo de energía aporta tranquilidad y calma.
¿Y por qué la sensación es de tranquilidad y calma?
Porque que nuestra energía está volviendo a su estado original, que es un estado armonioso y de equilibrio.
En un estado de equilibrio la calma está presente siempre, porque la calma no deja espacio al estrés, ni a las preocupaciones. La energía en movimiento armonioso está en calma, la calma aporta paz y todo ello aporta salud.
No estamos acostumbrados a estar en calma, en la sociedad en que vivimos, el orden del día es el estrés, las prisas, rápido, sin mirar ni escuchar nada. Para nosotros es un estado “normal”, pero realmente no es así. Nos hemos desconectado de cómo deben ser las cosas realmente, del flujo que se debe tener en la vida.
Como el agua de un río que fluye, su movimiento, su ruido, ¿qué te provoca? Calma…. Como el movimiento de los árboles y sus hojas, ¿qué te provoca? Calma….. Incluso cuando ves un bebé, un animal o alguna persona durmiendo plácidamente, ¿qué te provoca? Calma….
Porque el movimiento del agua es armonioso, porque la danza de los árboles con el viento, es armonioso, porque cuando dormimos, estamos relajados y es armonioso. Es el estado natural de las cosas, de la naturaleza; la armonía, fluir en equilibrio.
Por eso Reiki devuelve este estado natural de nuestra energía, la hace fluir, devuelve la armonía y de aquí viene la sensación de calma y relax. Es simplemente para que volvamos a nuestro estado original, natural.
La esencia es encontrar un equilibrio y la calma y la relajación vendrá sola. No es necesario que tengamos la mente puesta en cosas futuras, ni los pensamientos en lo que hemos vivido. Saber estar y ver tu presente, es estar en armonía con tu tiempo. La energía fluye y fluye ahora.
La magia del Reiki es, como si fueran mensajes subliminales, te va penetrando, sutilmente para incorporarte pequeños cambios para encontrar la calma y entender que tienes que vivir en el ahora y el aquí. Pero esto lleva tiempo, y constancia. Una herramienta, que te ayuda en hacer un clic y cambiar, simplemente, algunos conceptos y encontrar el estado natural de tu energía; armonía.